El gabinete social del Gobierno, reunido ayer en la Casa Grande del Pueblo, decidió respaldar la orden del presidente Luis Arce de militarizar las fronteras como una medida para combatir el contrabando inverso, que ha impactado negativamente en la economía nacional. Además, se acordó solicitar la colaboración de los Gobiernos municipales y departamentales para controlar el alza de precios de los alimentos, lo cual ha afectado especialmente a los sectores más vulnerables en las últimas semanas.
Vidal Gómez, dirigente de la Confederación Sindical de Comunidades Interculturales de Bolivia (Cscib), fue el encargado de anunciar las conclusiones de la reunión, que contó con la participación del presidente Arce, el vicepresidente David Choquehuanca, ministros de Estado y representantes de diversas organizaciones sociales afines al Gobierno.
Uno de los principales acuerdos fue la organización de una reunión de coordinación entre el Gobierno central, las alcaldías y las gobernaciones para definir estrategias conjuntas de control de precios en los mercados locales y evitar la especulación.
Asimismo, se instó a las organizaciones sociales y a la población en general a denunciar cualquier acopio irregular de alimentos destinado al contrabando hacia países vecinos, una actividad ilícita que afecta el abastecimiento interno.
Gómez informó que el gabinete social volverá a reunirse en un mes para evaluar la situación económica, política y social del país. En esa sesión, se revisarán los efectos de las medidas implementadas y se ajustarán las estrategias de ser necesario.
Seis medidas
Antes de la reunión, el ministro de Planificación del Desarrollo, Sergio Cusicanqui, detalló las seis medidas adoptadas por el Gobierno para mitigar los efectos de la inflación importada y el contrabando, especialmente de productos alimentarios.
Entre las medidas destaca la reducción de aranceles para la importación de trigo, maíz, maquinaria agrícola y otros productos esenciales hasta el 31 de diciembre de 2024. Además, se reforzarán los controles en los mercados locales a través del Viceministerio de Defensa del Consumidor y las alcaldías, con el objetivo de prevenir la especulación de precios.
Otra medida clave es la creación del Centro de Monitoreo del Comité de Seguridad Alimentaria, que desde La Paz garantizará el abastecimiento de productos básicos. Asimismo, se están impulsando ferias “Del campo a la olla”, que permiten la venta directa de productos agrícolas sin intermediarios, garantizando precios más accesibles.
Finalmente, Cusicanqui subrayó la intensificación de los controles en las fronteras con la militarización.