EDUCACIÓN INSTRUYE LA SUSPENSIÓN DE CLASES EN TRES REGIONES POR INCENDIOS

EDUCACIÓN INSTRUYE LA SUSPENSIÓN DE CLASES EN TRES REGIONES POR INCENDIOS

El ministro de Educación, Omar Veliz, instruyó ayer a los directores departamentales de Educación de Santa Cruz, Beni y Pando disponer la modalidad de clases virtuales y, si el caso amerita, suspender las labores con el fin de proteger a los estudiantes de los efectos de la humareda provocada por los incendios forestales.

El gobierno central declaró el sábado emergencia nacional por los incendios forestales que se prolongan hace tres meses en el oriente boliviano; la ayuda internacional comenzó a llegar al país. el fin semanda pasado.

Veliz explicó que asumió la medida porque los incendios forestales están afectando a la población. “Nos encontramos en un estado de emergencia, por ello instruyo a los directores departamentales cambiar la modalidad a clases virtuales y, si el caso lo amerita suspenderlas. La prioridad del Gobierno es cuidar la salud de nuestros estudiantes”, subrayó.

Alerta sanitaria

El Gobierno central emitió también una alerta sanitaria por la contaminación ambiental ocasionada por los incendios forestales. Las ciudades capitales y otras zonas registran altos índices de contaminación; frente a ese panorama, las autoridades de salud recomendaron el uso de barbijos y evitar los espacios abiertos.  

La ministra de Salud, María Renée Castro, explicó que la decisión se debe a que “de manera abrupta” se pasó a tener una “contaminación bastante elevada”, incluso mencionó que un departamento llegó a un Índice de Contaminación Ambiental (ICA) “extremadamente malo”. 

El ministro de Defensa, Edmundo Novillo, informó ayer que, de acuerdo a los datos más recientes, se registran 72 incendios que requieren ser atendidos de manera integral. “Hemos tenido una afectación de casi 4 millones de hectáreas, de las cuales el 60 por ciento corresponde a pastizales y el 40 por ciento a área boscosa”, señaló.

Rogativas en la Chiquitanía

Ayer, un grupo de feligreses de la población de Ascensión de Guarayos, en el departamento de Santa Cruz, protagonizó una procesión que acabó con la gente de rodillas orando para que llueva y se mitigue los incendios en esa ciudad.

Ascensión de Guarayos es una de las áreas más afectadas por los incendios forestales, y a pesar de los esfuerzos de bomberos y voluntarios, el fuego sigue devastando la flora y fauna tanto en ese municipio como en otras localidades cercanas.

Ante el desastre, el obispo auxiliar de Santa Cruz, Estanislao Dowlaszewicz, advirtió ayer que los incendios en la Chiquitania están generando un grave desastre ecológico y alertó que, de no tomarse acciones inmediatas, “la región podría convertirse en una nueva fábrica de carbón vegetal”

Las causas de los incendios  

El fuego se atribuye en muchos casos a los llamados ‘chaqueos’, las quemas controladas practicadas en las zonas agrícolas para la habilitación de las tierras para la siembra o el pastoreo.

El humo afecta directamente a los municipios donde hay incendios, pero también ha llegado a las capitales regionales y en los últimos días ciudades como Santa Cruz, Cochabamba, La Paz o Cobija tienen sus cielos cubiertos por la humareda y reportan mala calidad del aire.

Familias de Concepción evacúan sus viviendas

Las familias de las comunidades de Santa Mónica y Palestina, ubicadas en el municipio de Concepción (Santa Cruz), tuvieron que evacuar sus viviendas debido a la intensa humareda generada por los 10 incendios activos en este municipio. 

En Palestina, alrededor de 40 familias se vieron forzadas a desalojar la comunidad. Durante la evacuación, que incluía a personas de la tercera edad, niños y mujeres, una mujer sufrió un desmayo y tuvo que ser asistida con oxígeno. 

“¡No se puede aguantar más!. Una mujer se desmayó por el humo. Estamos abandonando la comunidad. Los soldaditos que estaban peleando contra el fuego, también saldrán del lugar”, afirmó a El Deber Moisés Masaí, vicepresidente zonal de Monteverde.

La situación es igual de desoladora en la comunidad de Santa Mónica donde el 80 por ciento de la comunidad que aglutina 80 familias, tuvo que desalojar el lugar y algunos hombres y mujeres se quedaron para evitar que el fuego llegue a las casas.