Juan Luis Coronado, Jaime Balanza o Dino Beltrán forman parte de los nombres que se proponen desde Tarija para ocupar la cartera de Hidrocarburos. Arce define con su círculo íntimo si nombrar un ministro tarijeño
A una semana de que Luis Arce Catacora asuma como Presidente del Estado y nombre el nuevo gabinete ministerial, que el mismo calificó como “la selección boliviana”, las diferentes facciones del Movimiento Al Socialismo (MAS) en Tarija hacen méritos para tratar de colocar sus fichas en el poder ejecutivo.
Las directrices del Pacto de Unidad en el ampliado sostenido el pasado miércoles fueron claras: gabinete de organizaciones sociales y netamente nuevo, pero aun así, existen áreas especialmente técnicas en las que Arce Catacora requerirá contar con especialistas.
Una de esas áreas es precisamente el Ministerio de Hidrocarburos, un área cargada de problemas por el momento coyuntural que atraviesa el mercado del gas natural, pero disputada por el enorme aparato que dirige: el ministro de Hidrocarburos es a la vez el presidente del Directorio de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), maneja la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) y tiene influencia en otras descentralizadas.
En Tarija suenan dos nombres: Jaime Balanza y Juan Luis Coronado – el Churqui -, y con mucha menos fuerza Dino Beltrán.
El primero fue gerente de Servicios Eléctricos de Tarija (Setar) al comienzo de la gestión de Lino Condori y después ocupó cargos en YPFB. Tiene el perfil profesional, pero por abajo, los masistas recuerdan su pasado emenerrista incluso con relación cercana con Gonzalo Sánchez de Lozada.
El segundo no ha desempeñado ningún cargo específico en la administración, pero ha formado parte del equipo “externo” del MAS en Tarija junto a Roberto Ruiz, Milcíades Peñaloza, etc. Perfil economista curtido en la vida privada – con contratos con el Estado – y que en algún momento fue vocero acreditado frente a la gestión de Adrián Oliva en la Gobernación.
Por su parte, Beltrán suena por su profesión y su proximidad a las Bartolinas tarijeñas, que en otras ocasiones ya lo han tratado de promover a cargos de importancia. Fue secretario de Hidrocarburos con Lino Condori.Luis Arce Catacora ya anunció que se reserva la potestad de elegir sin presiones por parte de matrices u organizaciones departamentales y su entorno lo mantiene aislado de “sugerencias”.
En Tarija Arce Catacora tiene familia política – por parte de su esposa Lourdes Durán Romero – con quienes ha coordinado en el pasado, sin embargo, está por ver el nivel de representación que asumirán en este nuevo embate.
Ministerio tarijeño
Desde que asumió Juan José Sosa el Ministerio en 2012, en plena crisis de Margarita, por cierto, la cartera de Hidrocarburos ha estado en manos de un tarijeño. Sosa, que fue Vicepresidente de Fiscalización y Contratos de Carlos Villegas en YPFB se fue en 2015, directo a la Gerencia de YPFB Andina.
Desde el Ministerio culminó la planta Separadora de Líquidos del Gran Chaco y le hizo prometer a Morales que la petroquímica se haría en el Chaco, aunque hasta el momento no se materializa.Su relevo en gabinete fue Luis Alberto Sánchez, también tarijeño y también catapultado desde la Vicepresidencia de Contratos y Fiscalización de YPFB.
Sánchez fue el Ministro de Hidrocarburos que más duró al lado de Evo Morales, pues renunció un par de horas antes que el expresidente el 10 de noviembre de 2019. Sánchez concentró el poder en el Ministerio que Villegas se había llevado a YPFB y abandonó progresivamente la línea de la industrialización para recuperar la de la exportación, que no logró resultados ni en mercados ni en inversión en exploración.
Tras la caída de Morales y de Sánchez asumió otro tarijeño, Víctor Hugo Zamora, senador y miembro de UNIR en aquel entonces. Diferentes fuentes señalan que en la elección influyó la cercanía al grupo de Sánchez para facilitar una suerte de transición y traspaso de negocios sin daños colaterales.
De su gestión se recuerdan más los escándalos comunes – cuatro presidentes de YPFB en 11 meses – pero también los de fondo: en su gestión se renegoció la adenda de exportación de gas a Brasil en el que se asumió el costo del transporte, se rebajó la nominación obligatoria y se concedió la excepcionalidad para no comprar el gas acordado.
La influencia de Tarija en la producción de gas ha caído en los últimos años, aunque sigue produciendo más del 50% del gas del país y abasteciendo el mercado de Argentina en solitario. Santa Cruz ha ganado presencia con el desarrollo de Incahuasi y Chuquisaca tiene muchos proyectos en exploración, incluyendo el fracking en Miraflores, que pueden alterar el tablero.
Desafíos y problemas para la industriadel gas
La exportación de gas sigue siendo uno de los principales ingresos del Estado y una de las principales fuentes de financiación de autonomías municipales y departamentales a través de regalías e IDH. Sin embargo, los mercados tradicionales de Argentina y Brasil han desarrollado proyectos de autoabastecimiento y Bolivia no ha logrado una salida al mar para participar del mercado del GNL.
Además, los proyectos de industrialización han demorado más de lo previsto, y a fin de ciclo, sin grandes proyectos exploratorios tradicionales que no resultan atractivos económicamente, la coyuntura se vuelve compleja, puesto que tampoco se fijó una reserva estratégica.
El Pais