Ha sido visto como un candidato débil por algunos de sus correligionarios y tiene ante sí el desafío de vencer al legado y la impronta dejada por Felipe Quispe, el Mallku, que corría como favorito en la carrera por la Gobernación de La Paz antes de su muerte, y al que probablemente lo reemplace su hijo, Santos. Además, tiene ante sí el desafío de demostrar que no es producto del “dedazo” del jefe de su partido, Evo Morales, y que tiene una propuesta para seducir al electorado paceño.
A sus 40 años, Franklin Flores tiene un largo recorrido político y dirigencial. Empezó precozmente, en la escuela, cuando fue dirigente estudiantil. Hizo lo propio en la Universidad Mayor de San Andrés, donde estudió derecho. Luego hizo su carrera política desde abajo, primero como autoridad originaria provincial, luego como concejal, presidente del Concejo Municipal y luego como diputado.
“He nacido, estudiado y trabajado en este departamento. De niño, hice la primaria en mi comunidad Aisacollo; luego en la escuelita del cantón Konani y la secundaria en la ciudad, en el Instituto Americano. Luego, la universidad en la UMSA, mi querida universidad, donde fui parte del centro de estudiantes. Conozco mucho la vida universitaria, trabajé hasta de portero, limpiando aulas inclusive. De todo para mantenerme. Pero la oportunidad de trabajar por mi departamento es fundamental ahora”, señala.
Se considera un político de consenso. “Siempre he estado coordinando con mis hermanos, de cerca. De eso se trata. El candidato tiene que ser un generador de consensos; sólo así tienes derecho a voz y voto”. Y resalta que su elección ha sido producto de ello: “más de 2.000 comunidades” lo han respaldado.
Le gusta decir que ha recorrido todos los municipios y que ahora, con campaña en pandemia, se dedica a visitar las comunidades para charlar con la gente y presentarles su propuesta.
“La Paz se juega todo (en esta elección). Tenemos un presidente, un vicepresidente, la bancada parlamentaria, un presidente de la Cámara de Diputados y haremos una alianza conjunta para que La Paz sea primero”. Es su promesa.
Las encuestas muestran que no hay tendencias definidas en La Paz para la elección de gobernador, sin embargo, la figura de Felipe Quispe -que recientemente ha fallecido- sobresale en las cifras, ¿cómo ve en este momento su candidatura?
Nosotros como MAS pensamos que las encuestas son una radiografía del momento y nos sirven para corregir errores y mejorar aciertos. Pero, también ese momento puede variar bastante. Por ejemplo, antes de las elecciones generales la misma empresa que sacó estas últimas encuestas no nos daba al MAS no más de 30% y llegamos a un 55%; en La Paz, el MAS no superaba el 40% y llegamos al 67%. Por lo tanto, respetamos las encuestas, las tomamos como un elemento para seguir trabajando, pero la encuesta final serán las elecciones del 7 de marzo.
Muchos analistas e incluso alguna gente dentro del MAS advierten que las designaciones por “dedazo” pueden afectar a los candidatos. Además se ha puesto en evidencia una división en el partido, ¿cuál es su opinión?
Quien mayor consenso ha obtenido para sus candidatos es el MAS. En La Paz somos 87 municipios y probablemente tengamos problemas en menos de 10 municipios, en el resto hay consenso. Somos electos por las bases; desde la comunidad, las federaciones, las centrales se ha llegado a un consenso general. En los municipios se eligen los candidatos bajo los procedimientos propios de usos y costumbres; se realizan ampliados y se eligen también candidatos a concejales. El único candidato a gobernador por el departamento de La Paz por el MAS que ha debatido su precandidatura ha sido Franklin Flores. Yo he sido propuesto por mi comunidad Aisacollo, municipio Sica Sica, provincia Aroma. Se ha elevado esa determinación a la Federación Departamental de Campesinos de La Paz Tupac Katari y a la Federación de Mujeres Bartolina Sisa; cerca a 2.000 comunidades generaron consenso, propusieron esta candidatura. No es sencillo generar consenso. En el MAS es más complicado salir candidato por el partido que ganar la elección. Ahora lo que nos corresponde es refrescar la memoria en cuanto a nuestras propuestas, y estamos trabajando en eso, visitando comunidades, municipios, regiones para seguir generando consensos y seguir construyendo este proyecto político.
Ud. dice que en el MAS es más difícil ser elegido candidato que ganar la elección, pero parece que esta elección va a tener un rival difícil. Decíamos que Felipe Quispe figura primero y es posible que su hijo sea su sucesor en esa candidatura…
Toda persona tiene derecho a participar, nadie lo prohíbe; por el contrario, la ley favorece que todos los ciudadanos bolivianos puedan participar y ejercer su derecho libre y democrático. Si él quiere hacerlo, pues adelante; quien define con su voto será el pueblo paceño en las urnas, son las reglas del juego de la democracia.
¿Cómo está llevando adelante su campaña en medio de una pandemia tan fuerte?
Evitamos las concentraciones masivas. Antes de la pandemia, el año pasado, concentrábamos miles y miles de militantes de toda Bolivia, de todas las provincias y proclamábamos a nuestros candidatos. Pero, como se habrá visto, ya no tenemos esas concentraciones, ahora son mínimas y en pocas comunidades. La dinámica ha cambiado con la pandemia, el candidato ya no está en la ciudad esperando las concentraciones, ahora tiene que ir a los municipios, a las comunidades y con concentraciones mínimas y las medidas de bioseguridad correspondientes, recomendadas por el propio TSE.
Su plan de gobierno tiene como pilares la salud, la educación y el trabajo, son temas clave, pero que no se han podido mejorar en décadas, ¿qué concretamente piensa hacer si es elegido?
Primero, la aplicación de la teoría y la práctica. Que los estudiantes aprendan la teoría para llevar a la práctica. Los gobiernos departamentales, según ley, tienen bajo su competencia a los institutos técnico superiores. Tenemos institutos concluidos y lo que corresponde a los gobiernos departamentales es equiparlos para que nuestros estudiantes cumplan con la teoría y la práctica, con talleres, etc. Por ejemplo, estuve la semana pasada en La Asunta y allí está construido un instituto tecnológico que se llama Evo Morales. Ese instituto ha tenido un costo de casi 23 millones de bolivianos; completito, con aulas, comedor, internado, ¡increíble!, pero le está saliendo arbusto porque no funciona, no está equipado; no tiene mesas, sillas, nada. Eso tiene que hacerlo el gobierno departamental. Y, obviamente, como el gobernador no está bajo los criterios y lineamientos que tiene el nivel central no lo ha hecho.
¿Cuál es su idea para enlazar la teoría y la práctica en un plan de desarrollo regional?
En nuestro plan de gobierno hemos propuesto instalar el complejo industrial en La Paz, en la ciudad de El Alto, bajo dos escenarios. Un primer bloque, el complejo de maquila; y un segundo bloque, el complejo industrial para transformar nuestras materias primas. El complejo maquila será para ensamblaje de vehículos, autopartes y tecnología, de todo lo que se quiera. Chile lo tiene y ensambla vehículos Hyundai, otros países también. El Alto cumple las condiciones para ser un centro maquila, estamos cerca de los puertos, tenemos un aeropuerto internacional. Por tanto, en una alianza estratégica entre el sector privado y el público, podemos construir ese sueño. ¿Qué le corresponde hacer a la Gobernación? Instalar infraestructura, servicios y accesos; tener servicios de instituciones como Impuestos Internos, Senapi y otras que estén en el mismo complejo. Y el sector empresarial equipa para ensamblar vehículos, herramientas o tecnología. El complejo industrial es también estratégico. Hasta ahora no hemos podido industrializar nuestras materias primas; nosotros pensamos que los pescados del lago Titicaca tienen que convertirse en sardinas, pero por marcas reconocidas, y exportar. Finalmente, garantizar la soberanía alimentaria en La Paz, con nuestras frutas del valle, del trópico, comprarlas e industrializarlas en alianza con el sector empresarial.
Sus propuestas plantean la solución por lo menos de dos problemas: primero, el tema de recursos, pues se ha visto las dificultades de coordinación y concurrencia entre el nivel central y los niveles subnacionales; luego la relación con los privados: si algo se ha debilitado en estos tiempos por diferentes medidas y señales del gobierno central es la relación con el sector privado, ¿cómo piensa superar ambos escollos para concretar sus proyectos?
Tenemos que generar condiciones para el sector empresarial, facilidades de trabajo. ¿Cómo?, poniendo a disposición los servicios necesarios para que funcione una empresa (agua, luz, etc), y, por otro lado, los accesos. ¿Cómo van a exportar?, construyendo caminos a los ejes troncales. Nosotros pensamos construir el complejo en el parque industrial Callutaca. Este parque ya está relativamente adecuado, pero nos falta accesos, conectar el parque industrial al camino que viene del Perú hacia Viacha, y de Viacha hasta Patacamaya que va hacia Chile. Son dos accesos y con eso resolvemos el problema. El otro tema es evitar los trámites burocráticos, que los empresarios no estén yendo de oficina en oficina; queremos concentrar todas las dependencias estratégicas en el mismo complejo, que esos problemas burocráticos se resuelvan inmediatamente. Creo que esos temas ayudarían bastante para que el sector privado invierta, genere empleo, oportunidades para nuestros jóvenes y más movimiento económico en La Paz.
Pero eso deberá contar con la voluntad política del gobierno nacional, porque la burocracia es un mal endémico de nuestro Estado…
En el plan nacional de desarrollo y en la propuesta de gobierno del hermano Luis Arce Catacora y el hermano David Choquehuanca está la desburocratización del Estado, por tanto, nosotros cumplimos cabalmente con ese principio. Es más, por eso nosotros no pensamos soltarnos del nivel central, nos vamos a agarrar de la mano del nivel central, nos agarramos fuerte y así vamos a llevar a La Paz a ser primeros y recuperar el liderazgo económico.
El departamento de La Paz parece haber perdido su liderazgo en desarrollo económico, las industrias han migrado a departamentos como Santa Cruz, y lo propio otras actividades comerciales, ¿qué piensa hacer para revertir esta situación?
Recuerdo que en una reunión con el sector empresarial de La Paz un empresario nos dice: “Mire hermano, estuvimos en un municipio en Santa Cruz y ese municipio no me ha cobrado intereses durante 10 años hasta que mi empresa ha despegado y recién me han empezado a cobrar. En cambio en La Paz, ni bien te instalas, te empiezan a cobrar y te quiebran”. Por eso muchas empresas migran y hay que trabajar dándole facilidades al empresario para que invierta en La Paz. Porque hay muchos empresarios paceños que se han ido a otros departamentos. Ahora vamos a convocar a nuestros empresarios, pero no solamente al empresario bolivianos, sino a empresarios extranjeros que puedan invertir en nuestro departamento.
Se han hecho muchas críticas al estado de la salud: la infraestructura es escasa, la salud no llega a los municipios y provincias. Ud. ha prometido cambiar esa situación, pero el MAS no lo ha logrado en 14 años. ¿Cuál es su propuesta?
Que el gobernador se ponga a trabajar; que el gobernador sea del pueblo, de la calle, de la carretera y no que quiera resolver todo desde su oficina o desde su hamaca en su casa. Así no se resuelve nada; el gobernador tiene que conocer todos los problemas que tiene nuestro departamento. En salud planteamos la construcción de un nuevo complejo hospitalario en Miraflores, es urgente. Estuvimos la semana pasada visitando el Hospital del Sur de El Alto, uno de los mejores hospitales de esta región, no sólo de Bolivia; un hospital que tiene 200 camas, que tiene su propio acelerador lineal, pero no está funcionando porque el gobernador no pone recursos humanos, es su competencia. Ahí hay espacio para 1.500 trabajadores de salud. Hay que trabajar en eso.
La coordinación y la concurrencia han sido un escollo en la gestión de gobernación y municipio. Se ha dado una confrontación en vez de una coordinación, una lucha de poder. ¿Si usted fuese elegido coordinaría con autoridades locales aunque no sean de su partido?
Hay que ponerse la camiseta de nuestro departamento y muchos líderes no están en la capacidad de hacerlo. Yo he sido diputado uninominal de la Circunscripción 18 de La Paz. A mi cargo estaba un municipio que se llama Chacarilla, que tiene 2.500 habitantes, muy pequeño en habitantes pero gigante en territorio en la provincia Gualberto Villarroel. Evo Morales le dio a cada municipio cinco millones de bolivianos para el plan de riego. Ellos tenían los cinco millones pero tenían que dar la contraparte, que es un millón y medio, del gobierno departamental. Como no estaba en el programa del gobierno departamental, el gobernador dijo no. Y ese municipio perdió cinco millones de bolivianos . Así sucede en muchos municipios.
¿Cree que la nueva camada de autoridades subnacionales sean capaces de pugnar por un nuevo pacto fiscal que se viene reclamando hace años?
Es momento de pensar en lo general. Los departamentos que eran potentes en minería en su momento compartieron los recursos con los otros departamentos. Es fundamental que los departamentos que en este momento son potentes en generar más recursos también puedan redistribuir. Ahora, con el pacto fiscal dicen: los que no generan presupuesto (recursos) quédense con el poco presupuesto que tienen y los que tenemos nos concentramos todo el dinero. Ese tema tenemos que resolverlo pensando en la historia y pensando a futuro, porque todos somos bolivianos. Entiendo yo que en este momento el pacto fiscal está en debate.
Hace años está en debate…
Sí, correcto, pero al margen del pacto yo pienso que La Paz debe pensar en generar sus propios recursos. Hay que ver cómo generar recursos y de ahí debatir con otros departamentos que son productores de hidrocarburos, por ejemplo.
Ud. ha propuesto una estrategia departamental de vacunación contra el Covid, ¿cómo piensa operarlo?
Primero pelearla por La Paz. ¿Cuántas vacunas vamos a tener? Sin ser egoístas con el resto, hay que garantizar para toda la población. De las vacunas que van a llegar, ¿cuántas son para La Paz?, ¿se sabe?, ¿quién debía pelear? El gobernador del departamento. ¿Cuántas veces el gobernador tuvo reunión con los municipios?, ¿los municipios estarán preparados para salir en vacunación masiva? Eso debería responder el gobierno departamental, pero no lo hace. Santa Cruz ya se planteó, se reunieron y están planteando que les den mayor cantidad de vacunas. Vamos a pelear por nuestro departamento y queremos tener un plan con participación de los municipios.
Pagina Siete