
Una carta revela que el ejecutivo de la Cidob, afín a Luis Arce, invitó a los representantes de Kailasa al 42 aniversario de la institución en Santa Cruz.

El encuentro entre los representantes del estado ficticio de Estados Unidos Kailasa y el presidente Luis Arce no fue casual. Una carta revela que los kailasas fueron invitados al acto de festejo por el 42 aniversario de la Confederación de Pueblos Indígenas del Oriente de Bolivia (Cidob), con sede en Santa Cruz de la Sierra.
La invitación con fecha del 30 de septiembre de 2024, lleva la firma del secretario ejecutivo de la Cidob, Justo Molina, además del sello de la institución.
En la misma carta que está dirigida a la “Delegación de los Estados Unidos de Kailasa”, hacen notar que en el acto estará el presidente del Estado boliviano, Luis Arce. “Estará presente nuestro presidente constitucional Luis Arce Catacora, hermanas y hermanos de las 34 naciones y pueblos indígenas, así como autoridades de los 9 países que conforman la Coordinadora de las Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica (Coinca)”, dice la misiva enviada a los kailasas en Bolivia.
Arce tuvo el encuentro con la representante de esta secta religiosa el 3 de octubre del año pasado. El mandatario recibió de regalo un libro y la foto de esa entrega después se viralizó en las redes sociales.
En principio la Cidob-arcista negó que los kailasas fueras invitados. Indicaron que se subieron a la testera a dar un presente a Arce, aprovechando la entrega de otros regalos.
Hace tres días (20 de marzo), el propio Molina afirmó a EL DEBER que los kailasas tienen 20 viviendas alquiladas y están viviendo en el territorio de los indígenas. “Nosotros no sabíamos, pero averiguando resulta que están como tres años en ese lugar, trabajando y haciendo contacto con los indígenas de la Amazonía (baure, esse ejja y cayubaba), que han firmado contrato”, indicó el ejecutivo.
La presencia de los kailasa cobró relevancia en Bolivia después de una investigación de EL DEBER. Sus representantes firmaron acuerdos de «cooperación bilateral» con poblaciones indígenas por 1.000 años, con la promesa de ayudarlos a cambio de territorio.
Los acuerdos se realizaron con el pueblo originario de Baure y Cayubaba, en el departamento de Beni, además de los indígenas Esse Ejja, en Pando.
Sobre el tema, la Cancillería de Bolivia se pronunció el viernes pasado, mediante un comunicado, indicando que no tiene ninguna relación con la “supuesta nación Estados Unidos de Kailasa”.
De esta organización se detuvo a tres irlandeses en Beni la semana pasada, mientras que otro grupo fue arrestado en la capital cruceña. Las autoridades promueven su expulsión definitiva del país.