La ciudad de Tarija continúa avanzando en la ampliación de los servicios básicos, especialmente en aquellos barrios que históricamente no contaban con acceso seguro al agua potable. En medio de un periodo marcado por restricciones económicas, las autoridades locales buscan priorizar proyectos que impacten directamente en la calidad de vida de la población.
Durante un encuentro con el periódico digital El Guadalupano, el alcalde Johnny Torres resaltó que esta obra es un ejemplo del trabajo conjunto entre instituciones, vecinos y cooperativas. “Aquí se ve el verdadero significado de gestión compartida, donde todos ponen su granito de arena para que las familias tengan agua en sus casas”, expresó.
La infraestructura instalada permitirá que aproximadamente 120 familias del barrio Nueva Esperanza, al sureste de la capital tarijeña, finalmente cuenten con el vital líquido dentro de sus domicilios. Vecinos que antes dependían de cisternas o de trasladar baldes a diario ahora podrán abrir sus grifos sin mayores dificultades.
El sistema fue financiado bajo un esquema tripartito, donde la Alcaldía cubrió el 40% del presupuesto, la Cooperativa Cosaalt otro 40% y los propios beneficiarios aportaron el 20% restante, demostrando el compromiso colectivo en sacar adelante esta iniciativa.
Con una inversión global de 195.468 bolivianos, el proyecto se convierte en un aliciente en tiempos complejos para la economía local, ya que impulsa empleo temporal y reactiva pequeñas empresas contratadas para la obra.
“Lo más valioso es que, a partir de hoy, estas 120 familias podrán encender sus duchas y llenar sus tanques sin preocuparse. Sabemos que sin agua simplemente no hay vida, por eso era tan urgente concretar este proyecto”, remarcó Torres durante el acto de entrega.
La inauguración contó con la presencia de dirigentes vecinales, representantes de Cosaalt y autoridades municipales, quienes coincidieron en la importancia de continuar replicando este tipo de modelos de participación solidaria para llegar a más barrios.
Finalmente, el burgomaestre exhortó a los vecinos a cuidar la red instalada, recordando que es fruto de un esfuerzo conjunto que debe ser preservado para beneficio de las próximas generaciones
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