
El panorama político rumbo a la segunda vuelta electoral en Bolivia mantiene expectantes a diversos sectores sociales y productivos. En Tarija, el transporte sindicalizado se perfila como un actor clave en el debate, dado el peso de sus organizaciones y su capacidad de incidencia en la toma de decisiones colectivas.

En diálogo con el periódico digital El Guadalupano, el ejecutivo del transporte tarijeño, Gabriel Pérez, informó que aún no existe una postura oficial respecto a qué candidatura respaldarán en esta nueva fase del proceso electoral. Subrayó que el análisis será amplio y que se impulsarán reuniones con las diferentes federaciones para construir una posición consensuada.

Pérez recordó que en la primera vuelta el sector expresó un respaldo inicial hacia la candidatura de Samuel Doria Medina, lo que se reflejó en los resultados obtenidos en el departamento. Sin embargo, aclaró que el nuevo escenario exige revisar nuevamente la estrategia, escuchando a las bases y evaluando las propuestas que se presenten.

El dirigente recalcó que Tarija fue una de las regiones donde más votos recibió Samuel, hecho que confirma la influencia de los transportistas en la definición de tendencias. No obstante, insistió en que “todo está en evaluación” y que la decisión final deberá responder a los intereses colectivos de las organizaciones afiliadas.
Uno de los puntos que marcó la posición del sector es el rechazo a la idea de legalizar vehículos indocumentados, conocidos como “autos chutos”. Pérez advirtió que esta medida resultaría perjudicial para el transporte formal, ya que las calles ya se encuentran saturadas de movilidades, particularmente en el sector informal.

“Legalizar esos vehículos sería fatal para nuestro rubro”, señaló al respecto, destacando que la defensa de los intereses del transporte organizado será prioritaria en cualquier negociación con los actores políticos.
Al mismo tiempo, el dirigente no descartó la posibilidad de abrir canales de conversación con todos los candidatos que participarán en la segunda vuelta, incluyendo a Rodrigo Paz. “Nada está cerrado, recién iniciaremos el debate interno y posteriormente se abrirá la negociación”, expresó.
De esta manera, el transporte tarijeño ingresa en un periodo de análisis y deliberación que será determinante para su definición política. La expectativa está puesta en las próximas reuniones, donde se anticipa que las federaciones presentarán sus posturas antes de fijar un respaldo oficial.
