Un expresidente propone reforma estructural de todo el sistema, incluida «la fallida modalidad de elección de los magistrados por voto popular»
Las elecciones judiciales, convocadas para el 1 de diciembre, nuevamente están en riesgo de que no se realicen por recursos judiciales interpuestos y los principales actores de distintas organizaciones políticas salieron a cuestionar dicha situación en medio de una serie de acusaciones.
El martes, Charles Mejía, presidente de una sala constitucional de Beni, ordenó al Tribunal Supremo Electoral (TSE) devolver a la Asamblea Legislativa las listas de los candidatos al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y al Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP), y declaró “desierta la convocatoria” para ambas instancias.
El mismo día se conoció que en Pando también se emitió un fallo en contra de la continuidad de las judiciales, aunque, sobre este segundo caso, el TSE aseguró que no fue notificado.
El expresidente y líder de Comunidad Ciudadana (CC), Carlos Mesa, afirmó que el gobierno de Luis Arce, “secundado por jueces obsecuentes, acaba de perpetrar un nuevo golpe a la democracia, intentando otra vez anular las elecciones judiciales para que los (magistrados) autoprorrogados sigan usurpando funciones y cometiendo ilegalidades”.
“La democracia (está) asediada sin freno”, expresó Mesa a través de su cuenta en X, al igual que varios otros políticos que igual usaron las redes sociales para mostrar su molestia por este nuevo suceso.
El expresidente Eduardo Rodríguez Veltzé consideró que se trata de “otro obstáculo judicial a la democracia” y en ese contexto reiteró que “es más que urgente iniciar un diálogo político y ciudadano para (comenzar con una) reforma estructural de todo el sistema, incluyendo la fallida modalidad de elección de los magistrados por voto popular”.
El gobernador encarcelado y líder de la alianza Creemos, Luis Fernando Camacho, señaló que “la inminente suspensión de las elecciones judiciales en Bolivia es una alerta muy peligrosa para lo poco que le queda a nuestra democracia”.
“La suspensión de estas elecciones muestra lo frágil que está el sistema ante el poder (…). El presidente Arce sólo genera más inestabilidad y desconfianza al endurecer su régimen dictatorial”, sostuvo.
«Bolsa de prebendas»
El expresidente y líder de una de las fracciones del Movimiento Al Socialismo (MAS), Evo Morales, dijo que advirtió “oportunamente sobre los riesgos en las elecciones judiciales”.
“¿Cómo se puede permitir que el reglamento de evaluación sea ignorado para habilitar a postulantes aplazados? ¿Por qué no se cuidó, desde el principio, la equidad de género y la representación de los pueblos indígenas? Las elecciones judiciales son una conquista del pueblo boliviano, un freno a los cuoteos partidarios del neoliberalismo. Lamentablemente, el gobierno nacional ha convertido esta elección en una bolsa más de sus prebendas, vaciando de legitimidad al proceso”, indicó.
El diputado de CC José Manuel Ormachea afirmó que él fue “el único diputado que insistió en todo momento que no habrá elecciones judiciales”.
“No me creían, ahí va. Un régimen autoritario no va a sacrificar su arma más poderosa de represión (…). Nunca quisieron que se realicen (las elecciones)”, señaló.
«Burla y sabotaje»
La senadora de CC Andrea Barrientos agregó que “los magistrados autoprorrogados vuelven a paralizar las elecciones judiciales burlándose de la voluntad popular y aferrándose al poder corrupto”.
“Su desprecio por la democracia es evidente ¡Basta de excusas! El pueblo exige un cambio real y la limpieza de este sistema podrido”, remarcó.
El diputado CC Enrique Urquidi sostuvo que el “gobierno judicial de Luis Arce, nuevamente, sabotea las elecciones judiciales”.
Aseguró que “el cogobierno con los autoprorrogados y otros serviles magistrados buscan subordinar a los demás órganos del Estado”.
El Deber