

La cartera de Estado aseguró que el presupuesto en moneda boliviana para YPFB “está garantizado” para la subvención e importación de combustibles, pero no es su competencia asignarle divisas directamente. Cada entidad, incluyendo YPFB, debe gestionar la compra de divisas ante el sistema financiero, aclaró mediante un comunicado

En un comunicado emitido cerca de la medianoche del martes, el Ministerio de Economía y Finanzas Públicas (MEFP) aseguró que el presupuesto en moneda boliviana para YPFB “está garantizado” para la subvención e importación de combustibles, pero no es su competencia asignarle divisas directamente.

“Este Ministerio ha atendido y procesado todas las solicitudes presupuestarias realizadas por YPFB y, a la fecha, no se cuenta con ningún pedido en curso”, dice en su parte inicial el comunicado.

Más adelante, la cartera de Estado, aclaró: “Es fundamental aclarar que no está dentro de las competencias del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas la asignación o entrega directa de divisas (dólares estadounidenses) a ninguna entidad pública o privada. Nuestra labor consiste en otorgar el presupuesto y la cuota en moneda nacional (Bs) para que cada entidad, incluyendo YPFB, gestione la compra de divisas ante el sistema financiero, conforme a la normativa vigente”.
El presidente de YPFB, Armin Dorgathen, en conferencia de prensa dijo el martes que YPFB requiere $us 55 millones por semana para adquirir el combustible que se subvenciona a la población y que en este momento no se cuenta con las divisas suficientes para garantizar este aprovisionamiento. «Son unos tres a cuatro días que vamos a tener problema. Como YPFB no podemos garantizar el abastecimiento de combustible, ya que yo necesito que el Ministerio de Economía me garantice los recursos».

El ejecutivo de YPFB responsabilizó también a la Asamblea Legislativa de que «nunca trabajó y no permitió que ingresen las divisas al país y el Ministerio de Economía tiene que hacer diferentes gestiones para poder garantizar las divisas y garantizarnos las divisas a nosotros (…)”.
En el comunicado del MEFP también se menciona que “el verdadero origen del problema” es la escasez estructural de divisas y que “no es un problema administrativo ni presupuestario, sino una consecuencia directa de dos factores estructurales que afectan a toda la economía boliviana”, como la caída de los ingresos por exportación de gas, el bloqueo político en la Asamblea Legislativa, “donde intereses sectoriales impiden la aprobación de más de $us 1.600 millones de dólares de créditos externos ya negociados”.
Según la cartera de Estado, estos recursos inyectarían divisas al país, aliviando la presión sobre las reservas (del Banco Central) y facilitando las importaciones que todos los bolivianos necesitan.
“El Gobierno Nacional no descansa en su labor de gestionar y superar esta compleja coyuntura. Sin embargo, hacemos un firme llamado a la responsabilidad de todos los actores. La administración de cada empresa pública debe ceñirse con máxima diligencia a los procedimientos establecidos. El pueblo boliviano debe saber que su Gobierno trabaja sin tregua para garantizar la estabilidad y el abastecimiento, enfrentando tanto los problemas estructurales heredados, como el sabotaje de quienes apuestan por el fracaso del país”, concluyó.